domingo, 10 de abril de 2011

Y finalmente...

Se dio cuenta como una lagrima recorría sus doradas mejillas ... tras haber derramado miles llegó a la conclusión de que todo se había acabado para ella. Nunca volvería a ser la misma desde entonces se comportaba de manera extraña,un tanto sigilosa y quizás temible.
Así que se planteo huir de ese mezquino lugar, logro conducir hasta un sitio donde no sintiera ese terrible deseo de caer en el llanto y derrumbarse.
 Hasta que logro tener la suficiente valentía como para poder mirar a su alrededor,pasaron unos minutos, que le dejaron tiempo para pensar que había sucedido y como había llegado hasta ahí , al levantar la mirada vio una preciosa playa ,la cual, le recordó a su infancia , de agua cristalina el retroceso del agua era de manera tímida y sumisa tan hermosa que no podía dejar de admirarla , algo hizo romper su tranquilidad , notó  que algo suave y reconfortante le acariciaba el pie se quedo extrañada pero no bajo cabeza ya que esa sensación la apaciguo tras unos minutos decidió conocer el origen , era un lindo perro blanco con un cordón rojo lo que llamo su interés .
Detrás de ese agraciado perro estaba su dueño un hombre alto , con unos ojos azules que le inspiraban tranquilidad , un individuo corpulento, más o menos de semejante edad y con un pelo rubio en el cual chocaban los rayos del sol.
Después de que él se disculpara por el comportamiento de su perro entablaron una conversación . Ella no estaba muy reacia a mantener una conversación pero tras contener ese sentimiento de amargura se dejo llevar .
 Finalmente se presentaron y se acomodaron sobre esa canela arena de playa

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